Por Khoa Doan / GICJ
Traducido por Juanita Beltran / GICJ
"Defender la libertad de expresión es un trabajo peligroso. Es nuestra responsabilidad como periodistas buscar justicia", escribió Lai desde la cárcel. Jimmy Lai, magnate de Hong Kong, fundó en 1995 el periódico prodemocrático Apple Daily. El periódico se empeñó en informar sobre noticias críticas dentro de China continental que han enfurecido al Partido Comunista Chino (PCC). El Global Times, periódico estatal chino, calificó a Lai de "traidor" por su "descarada colusión" con Occidente y le acusó de alimentar las recientes protestas en Hong Kong. Lai había expresado su libertad de expresión, un derecho humano fundamental, implicándose en actividades democráticas y reuniéndose con varios funcionarios de Occidente, como el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y el secretario de Estado de Seguridad, Mike Pompeo.
El 30 de junio de 2020, el régimen chino impuso en Hong Kong la Ley de Seguridad Nacional. Esta ley establece el máximo de cadena perpetua para actividades que el Estado considere subversivas, sectarias o terroristas, y aplica prohibiciones estrictas en torno a la colusión con fuerzas extranjeras. En consecuencia, Lai fue detenido y acusado de fraude relacionado con el arrendamiento de un edificio donde se ubicaba el Apple Daily. También fue acusado como sospechoso de colusión con fuerzas extranjeras y de poner en peligro la seguridad nacional en virtud de la Ley de Seguridad Nacional. El 8 de febrero de 2021, el Tribunal de Última Instancia de Hong Kong le denegó la libertad bajo fianza al señalar que el tribunal inferior había seguido una "línea de razonamiento errónea".
En abril y mayo de 2021, Lai fue encarcelado durante 28 meses por participar en asambleas no autorizadas durante las revoluciones de los paraguas amarillos de 2019. Posteriormente, el Apple Daily se vio obligado a cerrar en junio de 2021, el redactor jefe y otros cinco ejecutivos fueron detenidos, y se congelaron todos los activos vinculados a la empresa. El cierre ha deteriorado la libertad de expresión en Hong Kong, recogida en la Ley Fundamental tras su devolución a China desde el Reino Unido.
El hijo de Lai ha pedido al Reino Unido que intervenga en su condena de 5 años, debido a que Lai es titular de un pasaporte británico. Sin embargo, el gobierno de Hong Kong declaró: "nunca toleraremos, y deploramos enérgicamente, cualquier forma de injerencia de cualquier potencia o individuo extranjero en los procedimientos judiciales y los asuntos internos de la RAEHK". Los países occidentales, incluido Estados Unidos, han expresado su preocupación por la difícil situación de Lai y han denunciado lo que califican de deterioro generalizado de la protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales en virtud de una Ley de Seguridad Nacional impuesta por China. La portavoz del primer ministro Rishi Sunak, Anne-Marie Trevelyan, se había reunido con el equipo jurídico de Lai y apoyaba los derechos y libertades y el estado de derecho en Hong Kong.
Geneva International Centre for Justice (GICJ) expresa su preocupación ante el deterioro de la libertad de expresión en Hong Kong. La sentencia de Jimmy Lai fue considerada arbitraria irrespetando la ley fundamental de 1997. Instamos al gobierno de Hong Kong a reconsiderar la ley de seguridad nacional para respetar el derecho al acceso de información y el derecho de cada individuo a buscar y obtener información en poder de las autoridades públicas. Los jueces de Hong Kong deben respetar el estado de derecho y liberar a Jimmy Lai inmediatamente.
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