Por Yasmine Darwish / GICJ
Traducido por Lian Martínez / GICJ
Mohammed Shehadeh, de 14 años, murió a causa de disparos por parte de las fuerzas israelíes en Al-Khader, en la Cisjordania ocupada, el martes 22 de febrero. Ahmad Salah, activista local, informó que los soldados israelíes abrieron fuego hiriendo a Shehadeh antes de detenerlo, y que, además, los soldados impidieron que las ambulancias llegaran hasta él [1].
No es la primera vez que las fuerzas israelíes matan ilegalmente a civiles, incluidos niños. Las fuerzas armadas utilizan sistemáticamente munición real contra los manifestantes palestinos. Este asesinato se produjo unos pocos días después de la muerte de Nehad Amin Barghouti, de 19 años, quién también fue dado de baja por disparos de balas reales; sólo dos días después de la muerte de Mohammed Abu Salah, de 17 años, y sólo una semana después de la muerte de tres palestinos. Los incidentes mortales son habituales en Cisjordania, a menudo durante los enfrentamientos entre palestinos y tropas israelíes.
Según las reglas y normas internacionales que rigen el actuar de la policía, los agentes deben abstenerse de utilizar armas letales y, en su lugar, emplear acciones menos dañinas para calmar la situación y ayudar a reducir los enfrentamientos [2].
B'Tselem, un grupo de derechos israelí, informó que el año pasado murieron 77 palestinos a manos de las fuerzas israelíes en Cisjordania. A su vez, añadió que más de la mitad de los muertos no estaban implicados en ningún ataque. El Ministerio de Sanidad palestino dijo que decenas de personas resultaron heridas por munición real y balas de acero recubiertas de goma, disparadas por el ejército israelí. Según el principio de precaución, Israel está obligado a garantizar que las operaciones llevadas a cabo por sus fuerzas para mantener el orden público se planifiquen y lleven a cabo, con el fin de minimizar el riesgo de lesiones. El incumplimiento de este principio supone una infracción del derecho internacional humanitario.
A principios de este mes, Amnistía Internacional afirmó en un nuevo informe que Israel estaba cometiendo “ apartheid contra los palestinos” y que debía rendir cuentas por tratarlos como “un grupo racial inferior”. El embajador palestino apoyó esta opinión durante la reunión del Consejo de Seguridad del 22 de febrero. Además, ell Coordinador Especial de la ONU para el Proceso de Paz en Oriente Medio expuso también, la violencia que se ha producido en todo el territorio palestino ocupado durante los últimos meses y recordó que, según el derecho internacional humanitario, los ataques intencionados contra civiles, o los ataques que no distinguen entre objetivos militares y civiles, están prohibidos en cualquier circunstancia.
Geneva International Centre for Justice (GICJ) condena firmemente la política de Israel de disparar a matar y utilizar el uso excesivo de la fuerza. GICJ hace un llamado a la comunidad internacional con el fin de presionar a Israel para que deje de atacar a los manifestantes palestinos y condene toda forma de violencia contra el pueblo palestino.
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[1] https://www.thenationalnews.com/mena/2022/02/23/palestinian-boy-shot-dead-by-israeli-soldiers-after-allegedly-throwing-firebombs/.
[2] https://www.icrc.org/en/doc/assets/files/other/icrc-002-0809.pdf.
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