Traducido por Jennifer Tapia Boada / GICJ
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) anunció hoy su orden de conceder la solicitud de Sudáfrica de medidas provisionales que requieren que Israel cese sus operaciones militares consideradas como un riesgo para la destrucción del pueblo palestino en Gaza. Esta sentencia establece que la Corte ha encontrado una posibilidad urgente y concreta de que Israel esté cometiendo genocidio contra los palestinos como grupo, y que considera necesario imponer órdenes para prevenir violaciones adicionales de la Convención sobre el Genocidio. También ha determinado que existe una amenaza real de incitación genocida por parte de la dirección israelí que debe ser inmediatamente restringida. Esta no es una orden explícita de alto al fuego, sino un llamado a detener todas las operaciones que puedan contribuir al genocidio. Aún no está claro dónde reside esta distinción, pero es importante destacarlo de todas formas.
Este veredicto emana de la audiencia del 11 al 12 de enero de 2024, durante la cual ambos países argumentaron sus casos ante la Corte. El argumento de Sudáfrica, presentado en su demanda del 29 de diciembre de 2023, alegaba que Israel había demostrado la intención de llevar a cabo la destrucción del pueblo palestino. Los juristas sudafricanos en La Haya argumentaron que esta intención era evidente tanto a través de los indiscriminados ataques de Israel a civiles en Gaza desde el 7 de octubre de 2023, como a través de la retórica genocida de los principales líderes israelíes. En su fallo, la Corte citó varios informes de organismos de la ONU que destacaban los peligros inminentes enfrentados por los palestinos como evidencia de un posible genocidio en curso. Asimismo, la Corte señaló varias declaraciones de altos funcionarios israelíes que demostraban que podría existir la intención plausible de cometer genocidio y que esta intención puede encontrarse subyacente en la violencia de la agresión militar en Gaza. La mera posibilidad de un genocidio en marcha razonó la Corte, requería intervención inmediata en forma de las medidas provisionales otorgadas.
El fallo de la CIJ es vinculante para ambas partes. Israel ha sido ordenado a cesar las operaciones militares que contribuyen al genocidio en Gaza, levantar los bloqueos de ayuda humanitaria a los palestinos y cumplir con todas sus obligaciones en virtud de la Convención para prevenir el genocidio. Entre estas obligaciones se encuentra la prevención de más incitación al genocidio y la preservación de todas las pruebas que lo señalen. La Corte continuará monitoreando la situación en Gaza para asegurar que se cumplan estas medidas. Cabe destacar que este fallo se refiere únicamente a la solicitud de Sudáfrica de medidas provisionales.
El resultado de esta audiencia representa una victoria importante para la causa palestina y un recordatorio crucial de la ilegalidad del asalto de Israel a Gaza. Hasta el 25 de enero de 2024, casi 26,000 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes, la mayoría de los cuales son mujeres y niños. Otros 64,000 han resultado heridos y 1.7 millones han sido desplazados (OCHA). Es difícil separar cualquier acto de violencia contra civiles en Gaza de aquellos destinados a cometer genocidio.
Geneva International Centre for Justice (GICJ) apoya la decisión (el fallo) de la Corte y llama a la comunidad internacional a buscar su aplicación. La violación continua de los derechos fundamentales de los palestinos es inaceptable. Debe tomarse una acción inmediata para ayudar a las millones de personas que sufren en Gaza.
